UNNE Identifican áreas con riesgo hídrico en la ciudad de Corrientes Un trabajo realizado en el Instituto de Investigación y Desarrollo en Vivienda de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UNNE (IIDVi. FAU UNNE) avanza en la identificación de áreas con problemáticas de riesgo hídrico en la ciudad de Corrientes, con el objetivo de estudiarla en función de distintas variables urbano-ambientales. Se busca hacer aportes para recuperar la vinculación del río con la ciudad y superar las condiciones de vulnerabilidad y exclusión de esas zonas
El estudio “Focalización territorial en sectores con Riesgo Hídrico en la Ciudad de Corrientes. Las Áreas ribereñas vulnerables como Zonas Prioritarias para la Gestión Pública” forma parte de una beca doctoral CONICET-UNNE que estudia las áreas ribereñas fragmentadas y vulnerables de la ciudad de Corrientes, y busca contribuir al conocimiento sobre las dinámicas de producción de suelo en las costas de la ciudad.
Este trabajo en particular surgió con dos objetivos principales:
Por un lado, describir los procesos históricos y la situación actual de la urbanización en la ciudad de Corrientes, enfocado en el proceso de ocupación de áreas ambientalmente frágiles, y en busca de aproximarse a la configuración de una cartografía tentativa de riesgo hídrico.
Y por el otro, identificar las áreas ribereñas vulnerables y estudiarlas en función de otras variables urbano-ambientales, tendencias y proyecciones, para identificar patrones de configuración territorial.
La hipótesis en la que se sustentó el trabajo es que, por lo general, las áreas de riesgo ambiental o hídrico en la ciudad de Corrientes son también áreas que presentan patrones de configuración territorial caracterizados por la convergencia de distintos tipos de problemas: vulnerabilidad socio-económica, heterogeneidad socio-espacial, conflictividad social, aislamiento, fragmentación, segregación socio-espacial.
Así, en la investigación se planteó la necesidad de estudiar las dinámicas territoriales existentes, e indagar en criterios de actuación desde dos intenciones: volver accesible el río al resto de la ciudad y además, superar las condiciones de vulnerabilidad y exclusión, sin provocar procesos expulsivos.
AVANCES. La arquitecta María Florencia Rus, autora del estudio, y la Dra. Laura Alcalá, directora de la investigación, respecto a los avances de la investigación, comentaron que les permitió aproximarse a una mirada integral de las diversas variables que conforman la vulnerabilidad de estos lugares.
Resaltaron que las áreas costeras deben ser tenidas en cuenta como áreas prioritarias para ser abordadas desde diagnósticos integrales por la complejidad que estas detentan de riesgo hídrico y de vulnerabilidad ambiental, pero a su vez otras problemáticas socioespaciales.
Etapas del trabajo. Las investigadoras detallaron que el estudio se desarrolló a partir de una metodología cualitativa, estudiando en una primera etapa, temáticas y conceptos afines como: Inundaciones, riesgo ambiental e hídrico, vulnerabilidad, planes de riesgo; así como cuestiones vinculadas al derecho ambiental.
Para la comprensión de los procesos de ocupación histórica y actual de áreas vulnerables en la ciudad, tanto como proyectos y normativas existentes, se realizó un registro de información obtenida, de carácter primario, como entrevistas no-estructuradas realizadas a referentes claves del ICAA (Instituto Correntino del Agua y del Ambiente), comparación de mapas satelitales, imágenes aéreas históricas de Google Earth y elevación de perfiles.
Además como fuente de datos secundaria se relevó información procedente de organismos municipales (Gis Municipal. Diagnóstico y proyecto de Santa Catalina) e investigaciones realizadas en otros institutos de la región.
En tanto, para la generación de un mapa tentativo sobre áreas de riesgo hídrico fueron combinadas estas herramientas, junto con otras de análisis espacial, derivados de los Modelos Digitales de Elevación (MDE), mapas existentes en el diagnóstico para la ciudad realizado en el marco del Master Plan de Santa Catalina, y su superposición sobre un plano del parcelario urbano.
Así, a partir del mapeo realizado se determinaron áreas prioritarias, introduciendo como indicador, la localización de asentamientos informales, y en función del análisis histórico y el cruzamiento de mapas de elevación, riesgo de anegamiento e inundación y plano urbano catastral, se definieron siete áreas de riesgo.
Abordaje integral.
“Los patrones definidos exponen un primer acercamiento a la problemática, sin embargo para captar la dificultad que existe, es necesario un arduo trabajo de estudios más integrales, que se comprometan a indagar en la profundidad que subyace en otras escalas, dimensiones y actores” sostuvo la autora del trabajo que se enmarca dentro la línea mayor de investigación “Criterios y estrategias de Actuación en el Espacio Público de áreas urbanas costeras vulnerables y críticas”.
La arquitecta Rus comentó que el 90% de la población en Argentina vive en centros urbanos, donde particularmente en el territorio del litoral cada vez ocurren inundaciones con gran cantidad de personas afectadas, y donde los impactos de la urbanización, plantean un gran desafío de gestión.
Situación de Corrientes. El área metropolitana de Corrientes topográficamente se encuentra en condiciones favorables en relación al Gran Resistencia, implantada esta última en gran parte dentro del valle de inundación del Río Paraná. No obstante, los otros paisajes ribereños de Corrientes, aquellos no defendidos por la costanera, han recibido históricamente la localización de barrios informales o las tendencias privatizantes de propietarios particulares, y también se urbanizaron áreas anegables dentro del territorio como las lomadas y lagunas en la zona norte de la ciudad, y arroyos entubados o a cielo abierto.
Las inundaciones urbanas, pueden ser “pluviales o anegamientos” originadas por lluvias intensas o abundantes, o inundaciones “ribereñas o costeras” causadas por el desborde de los ríos o cursos de agua. En la ciudad de Corrientes, se presentan ambas situaciones y en algunos casos se superponen, considerándose de tipo “mixta” en la que se conjugan inundaciones por precipitaciones y desborde de ríos.
Distintas normativas provinciales y municipales en los últimos tiempos se han ido adecuando a fin de evitar la ocupación de áreas vulnerables, sin embargo el problema radica en la inexistencia en la ciudad de Corrientes de una gestión integral del riesgo de desastre (GIRD), “que se compone de un proceso de construcción y diagnóstico de las condiciones de riesgo, normativas que contemplen restricciones al uso de suelo (con cartografías actualizadas), entre muchos otros componentes, que sean utilizadas por los diferentes organismos de forma articulada y desde paradigmas más respetuosos de las condiciones ambientales del territorio”.
En este sentido, Rus reiteró que las áreas costeras deben ser tenidas en cuenta como áreas prioritarias para ser abordadas desde diagnósticos integrales por la complejidad que estas detentan.
Jueves, 5 de abril de 2018
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