CRISIS Turquía: clima de tensión con otros cuatro muertos y censura de medios El gobierno de Turquía continuó con la gigantesca purga de funcionarios policiales, militares y políticos acusados de participar en el fallido golpe de Estado del pasado viernes, desoyendo las voces de los principales líderes mundiales. En medio de ese creciente clima de tensión, cuatro personas, todas ellas civiles, murieron hoy en tres diferentes incidentes en Ankara, supuestamente en relación con la oleada de registros y detenciones que vive la capital turca.
Asimismo, denunciaron la censura y prohibición de unos 20 sitios webs y portales de noticias por parte del gobierno turco.
La Policía detuvo hoy a 103 generales y almirantes de las Fuerzas Armadas turcas, casi un tercio del total de 356 que componen la cúpula de las Fuerzas Armadas, según informa la agencia semipública Anadolu.
Entre ellos se hallan los comandantes del 2º y 3º Ejército de las fuerzas terrestres y el ex comandante de las Fuerzas Aéreas, Akin Oztürk, acusado de ser el cerebro del golpe.
Los militares están acusados de "conspiración para cambiar el orden constitucional por las armas", "resistencia armada contra la autoridad", "creación de una organización armada" y, en algunos casos, de "conspiración y realización de un ataque al presidente".
Entre los militares con rango de general, 16 pertenecen a la Fuerza Aérea, 15 son almirantes de la Marina y seis forman parte del cuerpo de Gendarmería, según se desprende de la lista completa de nombres publicada también por la agencia de noticias EFE.
Un total de 6.023 militares ya fueron detenidos, según las últimas cifras avanzadas por el primer ministro, Binali Yildirim.
Paralelamente, el Ministerio del Interior de Turquía anunció hoy que suspendió a 8.513 oficiales de la Policía y la Gendarmería, un cuerpo policial militarizado, entre los que se encuentran 11 generales y 61 coroneles.
La lista de los agentes suspendidos fue enviada a las provincias y los policías afectados fueron llamados a las direcciones de seguridad provinciales, donde tuvieron que entregar sus armas y sus identificaciones.
Además fueron suspendidos un gobernador provincial, 29 ex gobernadores, que ocupan cargos simbólicos en la administración regional, y 47 responsables de distritos.
También han sido relevados de sus cargos cientos de funcionarios, desde registradores de la propiedad a asesores judiciales e incluso conserjes.
No es la primera vez que la Policía turca vive una purga de este tipo, ya que en los pasados dos años el gobierno venía ordenado suspensiones masivas, dirigidas contra supuestos seguidores del predicador conservador Fethullah Gülen.
El ejecutivo del partido islamista AKP y el presidente Erdogan acusan a este predicador exiliado en Estados Unidos de querer montar un "estado paralelo" y de organizar este levantamiento militar para derrocar el gobierno.
Respecto a los cuatro civiles muertos y de acuerdo a la información suministrada por los distintos medios turcos e internacionales, el primer incidente se produjo cuando una persona no identificada disparó cerca del edificio del Tribunal Supremo contra los policías que están llevando a cabo un registro para arrestar a decenas de jueces de este cuerpo, luego de lo cual fue abatida por los propios agentes.
En otro incidente, que tuvo lugar a varios kilómetros de los Juzgados, los ocupantes de un coche dispararon contra una patrulla de la policía, que devolvió el fuego y uno de los tres ocupantes del vehículo murió en el tiroteo y los otros dos fueron detenidos.
En un tercer suceso, una persona, que luego fue identificada como un oficial del Ejército, al verse rodeado por policías, tomó como rehén al conductor de un coche, le disparó y emprendió la fuga con este vehículo.
Al no poder continuar su huida, comenzó a disparar a los policías y se trasladó a un coche distinto, pero fue finalmente arrestado, tras haber matado de un disparo en la cabeza al segundo rehén.
Según el último balance dado a conocer hoy por el primer ministro turco, Binali Yildirim, en un discurso televisado, en total murieron 208 personas que se resistieron al golpe, entre ellos tres soldados, 60 policías y 145 civiles, mientras que 1.491 personas resultaron heridas. A esta cifra hay que agregarle a cerca de un centenar de involucrados en el intento de golpe, lo que eleva el total de muertos a 290.
Además, fallecieron 24 soldados golpistas y 50 resultaron heridos, precisó el primer ministro, quien volvió a responsabilizar del golpe al predicador Fethullah Gülen, exiliado en Estados Unidos.
Además, precisó que desde el pasado viernes fueron detenidas más de 7.500 personas, entre ellas unos 650 civiles, informó Según Yildirim, en los ministerios hay funcionarios que se unieron a la conspiración golpista por lo que reveló que empezaron “a limpiar el sistema”, por lo que precisó que ya fueron suspendidos más de 10.000 de ellos en diferentes áreas.
"Estos números van a cambiar (subir)", aseveró el primer ministro ante la prensa y en presencia de su gabinete.
En referencia a la censura de sitios webs, la plataforma Engelliweb y Yaman Akdeniz, un activista que analiza este tipo de bloqueos, denunció que un total de 20 portales de noticias y páginas web fueron prohibidos por el gobierno de Turquía.
Turquía censura decenas de miles de páginas de Internet, entre ellas tanto plataformas políticas como de pornografía y también ha bloqueado temporalmente Twitter y YouTube.
En cuanto al creciente debate sobre la pena de muerte pedido ayer por Erdogan, Yildirim relativizó un poco las declaraciones hechas en las pasadas 48 horas y reconoció que si bien el Gobierno debe tener en cuenta las demandas del pueblo siempre debe decidir con cautela.
"El Parlamento debe debatir este asunto. No podemos decir ni sí ni no por adelantado", señaló el primer ministro.
Lunes, 18 de julio de 2016
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