ENFRENTAMIENTOS El Ejército iraquí, EEUU y milicias kurdas cierran el cerco sobre el Estado Islámico para recuperar Mosul Mientras los atentados suicidas siguen sacudiendo la vida cotidiana de los iraquíes, especialmente en Bagdad, en el norte, el Ejército, la coalición internacional liderada por Estados Unidos y milicias kurdas continuaron hoy cerrando el cerco sobre el Estado Islámico y afinando los detalles para recuperar la ciudad de Mosul. El jefe del Comité de Seguridad del Consejo de la provincia norteña de Nínive, Mohamed al Bayati, dijo a la agencia de noticias EFE que el Ejército está rastrillando y preparando la base aérea de Al Qayara, recuperada de manos del Estado Islámico (EI) el fin de semana pasado, para convertirla en el punto de lanzamiento de la ofensiva final, con la que esperan recuperar Mosul, el último gran bastión urbano de la milicia extremista.
La toma de la base militar, estratégica por ubicarse al sur de Mosul y a pocos kilómetros de la unión de los ríos Tigris y Eufrates, fue apenas un paso en la avanzada y el movimiento de pinzas que el Ejército iraquí y sus aliados en esta lucha contra los islamistas -Estados Unidos y las fuerzas kurdas- realizan desde finales de marzo pasado.
El EI tomó la ciudad de Mosul, la segunda en importancia en Irak, en junio de 2014 y poco después avanzó sobre otras regiones del país y de la vecina Siria hasta controlar más de un cuarto de esos territorios y declarar la fundación de un "califato islámico" para todos los musulmanes del mundo.
Desde entonces, el EI ha sufrido reveses y logrado avances. Sin embargo, en los últimos meses y tras el involucramiento de algunas de las principales potencias mundiales -como Estados Unidos, Rusia, Francia y Reino Unido- la milicia radical está perdiendo terreno.
En el marco de esa avanzada, Al Bayati también contó a EFE que la coalición internacional liderada por Washington atacó hoy desde el aire la zona de Al Mashmua al Zaqafia, en el este de Mosul. Al menos 10 milicianos del EI fallecieron, según informó.
En tanto, el responsable de información de la Comandancia de las Operaciones para la Liberación de Nínive, Feras Sabri, aseguró que otros 14 milicias extremistas fallecieron en un bombardeo aéreo del Ejército iraquí, al sur de Mosul, no muy lejos de la base militar recuperada de Al Qayara.
Una agencia de noticias vinculada al EI, Amaq, informó además hoy que el llamado "ministro de Guerra" de la milicia falleció en combate en la ciudad iraquí de Shirqat, al sur de Mosul, lo que confirmaría el anuncio que había hecho el Pentágono al principio de la ofensiva, en marzo.
Según había informado Estados Unidos, Abu Omar al Shishani, murió en uno de los bombardeos aéreos casi cotidianos que sus aviones lanzan desde hace tres meses y medio.
Mientras la avanzada sobre el último gran bastión urbano del EI en el país continuaba en el norte, el gobierno iraquí sigue siendo golpeado por atentados suicidas, la mayoría reivindicados por esa milicia extremista y contra objetivos civiles.
Tras 10 días del atentado suicida contra el shopping en el barrio de Al Karrada que dejó casi 300 muertos y conmovió al país entero, al menos cuatro iraquíes fallecieron hoy y otros 15 resultaron heridos cuando un coche bomba explotó en un puesto de control a sólo 30 kilómetros al norte de Bagdad, informó la policía.
Ayer, otras seis personas murieron por el estallido de otro coche bomba en un mercado de frutas y verduras ubicado en el norte de la capital iraquí, no muy lejos del puesto de control atacado hoy.
La ola de atentados suicidas ha generado una serie de protestas y de malestar en la sociedad iraquí contra el gobierno nacional, al que ven como incapaz de frenar la violencia.
Sin embargo, y pese a la creciente tensión social, el objetivo primario de Bagdad y de sus aliados ahora es expulsar al EI de la última gran ciudad bajo su control.
Por eso, el gobierno de la región autónoma del Kurdistán iraquí y el Departamento de Defensa de Estados Unidos firmaron ayer un memorando de entendimiento para coordinar sus fuerzas durante la ofensiva sobre la norteña Mosul, una ciudad cercana a la zona de control kurdo, lindante con Siria, Turquía e Irán.
El presidente kurdo, Masud Barzani; el ministro de las fuerzas armadas peshmergas, es decir, de las milicias de esa región, Karim Senyari, y la secretaria adjunta de Defensa de Estados Unidos para asuntos internacionales, Elissa Slotkin, firmaron el documento, que estipuló una cooperación durante y después de la ofensiva de Mosul.
Washington ya había anunciado que enviaría 560 soldados más a Irak para ayudar en la liberación de Mosul, una medida que hoy copiaron sus aliados franceses.
"Vamos a intensificar la participación del Ejército para apoyar a los iraquíes con la perspectiva de reconquistar Mosul", anunció el presidente Francois Hollande en París, en un discurso durante una recepción en el Ministerio de Defensa con motivo del nuevo aniversario de la Toma de la Bastilla durante la Revolución Francesa que se celebrará mañana.
Todo indica que la batalla por Mosul será una masiva y sangrienta. Prueba de ello es que el gobierno iraquí, por primera vez, está planeando un plan de emergencia humanitaria de antemano.
El ministro de Inmigración y Desplazados, Yasem Mohamed, contó a EFE que ya tienen preparado un plan para recibir y alojar futuros desplazados civiles que escapan de los combates y los bombardeos aéreos.
El plan incluye tres posibles escenarios: el desplazamiento de 250.000 desplazados, en el mejor de los casos; la huida de medio millón o, en el peor de los casos, de hasta un millón de personas.
Antes de la entrada del EI en junio de 2014, alrededor de 2,5 millones de iraquíes vivían en Mosul.
Ayer el EI difundió un video que muestra el interior de Mosul y los efectos de la campaña de bombardeos aéreos de la coalición internacional liderada por Washington.
Protagonizado por el periodista británico John Cantlie, que fue secuestrado por el EI en Siria en 2012 y desde entonces es obligado a encabezar "mini noticieros" en inglés para la milicia, el video muestra edificios históricos, mercados y casas "destruidas por la aviación de Estados Unidos" y nuevamente pide que Washington se retire del país.
Tanto de un lado como del otro se preparan para lo que podría ser una batalla crucial para el futuro de Irak y de los islamistas del EI.
Jueves, 14 de julio de 2016
|