... |
|
CONDENADA A LA HORCA Sudán: brutal condena a latigazos Fue difundido para mostrar la brutalidad del régimen ante la condena a la horca y 100 azotes a una musulmana casada con un cristiano. Brutalidad. Sadismo. Inhumano. Cruel. Bárbaro... no existen palabras suficientes para calificar las condenas a las que son sometidas las mujeres en Sudán -y en otros regímenes extremistas-, por el solo hecho, por ejemplo, de renunciar a sus creencias religiosas y contraer matrimonio con una persona que profese otra fe.
Ese es el caso de Mariam Yahia Ibrahim Ishag, de 27 años, una mujer que fue hallada "culpable" de "apostasía" y "adulterio" por un tribunal de Sudán y condenada a 100 latigazos y a la horca por ese hecho. La pena se conoció mientras Mariam quedó embarazada de su segundo hijo, nacido hace dos semanas.
El hecho despertó la indignación mundial y varias organizaciones de defensa de Derechos Humanos alzaron la voz para evitar la brutal sentencia contra la mujer. Una de ellas, RedRess -un organismo con 20 años y dedicado a las denuncias de torturas y abusos de poder en todo el mundo- hizo circular un video en el que se muestra cómo se ejecutan este tipo de sentencias. Su objetivo: crear conciencia y el repudio generalizado de todo el mundo.
"Le dimos tres días para abjurar de su fe, pero usted ha insistido en no volver al islam. La condeno a la pena de muerte en la horca", declaró el juez Abas Mohamed al Jalifa, dirigiéndose a la mujer por el apellido de su padre, de confesión musulmana, el 15 de mayo, día en que se conoció la sentencia.
Meriam Yahia Ibrahim Ishag (su nombre cristiano) también fue sentenciada a cien latigazos por "adulterio". La joven permaneció impasible al conocer el veredicto. Antes, durante la audiencia, tras una larga intervención de un jefe religioso musulmán que intentó convencerla, dijo sosegadamente al juez: "Soy cristiana y nunca he cometido apostasía".
También Amnistía Internacional ha puesto en marcha una petición internacional para presionar al Gobierno sudanés a fin de que libere a la detenida, quien ha recurrido su sentencia. Sin embargo, tampoco recibió una respuesta positiva.
Mariam Ishag, con su recién nacido en brazos y su otro hijo, esperando la condena a la horca. El video -cuya autenticidad fue confirmada por el gobierno de Sudán- muestra cómo otra sentenciada sin identificar recibe decenas de latigazos, "como ejemplo hacia los demás". En él se pueden ver cómo los policías que llevan adelante la flagelación de la mujer se ríen entre ellos y hacen bromas al respecto. Todo un acto de sadismo.
Organismos internacionales especulan con que la difusión de las imágenes presionará a las grandes potencias para que intercedan a favor de Mariam Ishag y alcen su voz contra el régimen de Sudán, que hace pocas semanas había dado indicios de que liberaría a la condenada, aunque todavía continúa en prisión y esperando ser azotada.
Jueves, 12 de junio de 2014
|
|
... |
|
Volver |
|
|
|