PREOCUPACIÓN Nuevos chaparrones suman agua y preocupación a pobladores de Esquina Entre el martes y el miércoles la lluvia acumuló otros 85 milímetros a los pluviómetros del Sur provincial. Ahora temen que el impacto, que en principio fue más fuerte en el Sur del departamento, se acreciente en el Norte y deje a más poblaciones aisladas y caminos cortados. Intendentes de la región analizan un pedido conjunto de respaldo a la Nación.
El viajero que recorre las calles de Esquina por la mañana puede sentir la humedad y la tensión por partes iguales. Los comercios tienen las puertas abiertas, pero pocos entran. Los empleados se acomodan, como estatuas vivientes, sobre mostradores a la espera de clientes que tardan en llegar. Sólo hay mucha gente en la esquina de la calle Sarmiento, frente a la plaza principal, haciendo fila en el Banco Nación. Pero por el resto, la marcha es lenta.
El viajero incauto o refugiado en una mirada ingenua podría pensar que ese es el pulso normal de un pueblo. Que la actividad se despereza tranquila antes de tomar impulso.
Pero Esquina no es así. Es una de las ciudades más pujantes del Sur correntino y sus pobladores son, en general, proactivos y madrugadores.
El impacto de las lluvias de los últimos días se siente en el ánimo de todos, igual que la humedad, y los pronósticos, en distintos aspectos pero sobre todo los climáticos, no ayudan a la esperanza.
A las 10 de ayer, el intendente Humberto “Pipo” Bianchi citó a los periodistas locales a una conferencia de prensa para dar un informe sobre la tarea de asistencia realizada hasta ahora por la gestión municipal, pero también para hacer “aclaraciones”.
Demoró unos minutos en llegar y cuando lo hizo ingresó también tenso. Se disgustó con un conciudadano que estacionó su vehículo en el espacio reservado para las autoridades municipales y entró hecho un torbellino a su despacho, donde saludó a la mayoría de los periodistas por su nombre y advirtió de entrada que “no sería una conferencia de prensa habitual, sino un poco más larga”, ya que tenía “varias aclaraciones para hacer”.
Los cuestionamientos sobre la distribución de las donaciones a los pobladores afectados parecen haber sido parte del origen de su mal humor. Pero principalmente la lluvia de la madrugada anterior que sumó otros 85 milímetros a los más de 700 ya llovidos fueron la principal causa de preocupación de Bianchi, quien anticipó en ese contexto que analizan junto a otros jefes comunales de departamentos vecinos un pedido conjunto a la Nación para ayudar a paliar el difícil trance por el cual atraviesa la región.
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Constricción y respeto
“Es un día más de trabajo para quienes tenemos la responsabilidad de la gestión de gobierno, pero también para los muchísimos voluntarios que acompañan en esta lucha sin cuartel que representa este fenómeno climático y que afecta a toda la región no sólo al departamento de Esquina”, pronunció Bianchi.
Varias veces, durante su diálogo con los medios, resaltó la “responsabilidad y sensibilidad social” con que se vuelvan, municipales y voluntarios, a la tarea de asistencia a las familias afectadas, que según estimó ya sumarían las cinco mil en todo el territorio esquinense.
“Es un hecho sin precedentes en nuestra historia, y tenemos que ser responsables y solidarios todos, también a la hora de hacer apreciaciones”, deslizó.
En ese sentido, admitió su malestar para con quienes -personas o sectores- parecen haber cuestionado la administración que se ha hecho de los recursos que arribaron a la ciudad para los inundados. “La gente que trabaja en el ámbito municipal y tampoco los voluntarios que acompañan se van a quedar con ningún paquete, ni con ningún colchón”, aseveró.
“Trabajamos con compromiso social y algunos, con desconocimiento o con intenciones de sumar zozobra, dicen cosas inadecuadas”, sostuvo además. “Hay gente que quizás se alegra de que estemos inundados porque piensan que van a sacar algún rédito político en las próximas elecciones”, criticó con contundencia.
Con vehemencia Bianchi recordó que el fenómeno de “El Niño” ya había golpeado “a la comunidad de Esquina en diciembre”, y ahora lo hace “con más de 700 milímetros en cinco días” a toda la comunidad.
“El tornado y la lluvia cayeron sobre toda la comunidad, no sobre el Municipio”, enfatizó, a la vez que pidió “actitud de constricción y respeto” para sumarse a la tarea de “llevar alivio a los sectores más afectados”.
Diferencia entre recursos y donaciones
Desde que comenzó el desastre, Esquina recibió por parte del Gobierno provincial y nacional menos de dos mil módulos alimentarios, 100 chapas de cartón, 100 colchones, 100 frazadas, algo de calzado y algunas cajas de leche.
“El conurbano y el Sur del departamento fueron hasta ahora las zonas más afectadas, a las cuales se asignó una mayor cantidad de estos recursos en la distribución. También se recibió el aporte de cortes de nylon, enviados por el Instituto Provincial del Tabaco”, explicó Bianchi.
En ese aspecto, precisó que en la primera sección de Esquina, a la cual corresponde el ejido urbano, se distribuyeron hasta ahora 540 módulos de alimentos, 500 cajas de leche, 30 cortes de nylon, 2 packs de pañales.
Hacia la segunda sección rural (a la cual pertenece Guayquiraró), se enviaron 300 módulos de alimentos, 350 cajas de leche, 25 cortes de nylon y un pack de pañales.
A la tercera sección rural se llevaron 150 módulos alimentarios, 160 cajas de leche, 25 cortes de nylon y un pack de pañales.
A Malvina, de la cuarta sección rural, ubicada al Norte del departamento, se enviaron 40 módulos alimentarios, 40 cajas de pañales, 20 cortes de nylon y un pack de pañales.
A Cuchillas, en la quinta sección, se destinaron 300 módulos alimentarios, 300 cajas de leche y un pack de pañales.
“También se distribuyeron muchos litros de agua, pero en eso tenemos capacidad de seguir distribuyendo, ya que nuestra red de agua potable no se vio interrumpida en su proceso de potabilización”, explicó Bianchi.
Por otra parte, Bianchi aseguró que la tarea de asistencia se ha visto en estos días “altamente potenciada por el sentido solidario de los conciudadanos, tanto los que más como los que menos tienen están aportando”, subrayó. Ese aporte solidario permite en gran parte la preparación de las cuatro comidas que se ofrecen en los siete centros de evacuados que coordina el Municipio, donde “las personas albergadas, que son unas 700, reciben asistencia médica, alimentaria, actividades recreativas en talleres y sin el aporte de mucha gente seguramente el panorama hubiera sido mucho peor”, evaluó Bianchi.
Asimismo el Intendente enfatizó la “muchísima voluntad de donación” por parte de personas que se comunicaron para solidarizarse por la emergencia desde Buenos Aires, Córdoba, San Luis, La Pampa y Corrientes Capital.
No obstante, remarcó que hasta ahora lo que el Municipio recibió en concepto de “donaciones” fueron “lo se puede transportar en el baúl de un vehículo que acercó la fundación’ Corriente por los Niños’ y fue destinado al centro de evacuados de la Sociedad Rural”, y “lo que se carga en un vehículo, que fue entregado por (el cantante de Los Alonsitos) Ariel Báez, tras una colecta de una radio de Corrientes, y fue destinado al centro de evacuados de la Escuela 434. Un tercer aporte con dos envíos de camionetas arribó por parte de un compueblano, David Lacroze y fueron destinados también a los centros de evacuados.
Lluvia para rato, complicaciones en el Norte
Con toda la región afectada por las intensas lluvias, y las cuencas hídricas sobrecargadas, la probabilidad de la continuidad de las precipitaciones no pueden ser sino desalentadoras para quienes viven en el Sur correntino.
Pero luego de más de una semana de lluvias en varios departamentos la situación se complica también en Sauce, Mercedes, Monte Caseros, Curuzú Cuatiá y Goya, además del Norte entrerriano.
“Otros 85 milímetros cayeron sobre la zona según la estación meteorológica instalada en Rincón de Sarandí.
La continuidad de la lluvia podría ahora complicar más a la región Norte del departamento, que hasta el momento sólo había recibido la mitad de las precipitaciones que el centro de la ciudad y el Sur departamental. “Los caminos se van deteriorando más y comprometen la transitabilidad de la Ruta 30. Deberemos volver a usar los servicios del helicóptero del Ejército o de Prefectura para poder llegar a todos los lugares inaccesibles”, determinó.
Intendentes con pedidos a la Nación
Según deslizó Bianchi durante la conferencia, intendentes de distintos departamentos correntinos evalúan una posible presentación conjunta para “hacerle saber al Gobierno nacional de la preocupación que tenemos ante tamaño desastre”, anticipó.
“Tanto el Gobierno provincial como el nacional tienen conocimiento de lo que está sucediendo. Tenemos que buscar herramientas para tratar de morigerar el impacto del desastre”, enfatizó.
La intensidad de la lluvia y la cantidad de las precipitaciones comenzaron además a deteriorar no sólo viviendas y caminos, sino también otras estructuras como los edificios de las escuelas que mostraron su avería durante las últimas horas, al punto de sufrir derrumbes de muros y filtraciones en techos de varios establecimientos.
Además, se avanza para evaluar el impacto sobre el sector productivo y comercial. “La actividad pecuaria, en el caso del agro, está afectada en un 100 por ciento, y el impacto en la actividad ganadera también es altísimo. Todavía no podemos cuantificarlo, pero el daño es altísimo en toda la región”, sostuvo Bianchi.
“Otro aspecto a tenerse en cuenta es el efecto en emprendimientos de otra naturaleza. Al cortarse la cadena productiva, también se ve afectada la cadena comercial”, expresó al final.
Hoy, pobladores de zonas rurales esperarán con anhelo el arribo del helicóptero o de los UNIMOG del Ejército, que traen hasta sus casas la única posibilidad de acceder a medicina y alimentos. Mientras los niños evacuados, en las escuelas que funcionan como centros de contención, volverán a correr, jugando por los pasillos y esperando. Sus padres, también esperando, volverán a mirar el cielo por si sale el sol.
Jueves, 14 de abril de 2016
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