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BARRIO PUJOL Vándalos atacan a “cascotazos” a un patrullero e intentan copar una comisaría  Vándalos que ocasionaban disturbios en la vía pública atacaron a cascotazos a un patrullero y minutos después arremetieron, de igual manera, contra la comisaría Undécima ubicada en el barrio Pujol de la ciudad de Corrientes. Según trascendió este ataque no sería el primero y la práctica sería incluso “ habitual”.
Fuente: Radio Dos Los incidentes motivaron el despliegue de una numerosa cantidad de móviles y efectivos de grupos especiales de la Policía, quienes mantuvieron un breve enfrentamiento con alrededor de 50 pandilleros.
El inédito episodio sucedió ayer a la madrugada, luego de que varias personas llamaron telefónicamente al sistema de emergencias 911 para quejarse de desmanes en una plaza situada frente a la escuela número 293.
Música en alto volumen, gritos e interrupción del tránsito, sumado a “cobros de peaje”, dispararon el pedido de ayuda a la Fuerza del orden.
Un móvil con efectivos de la comisaría del barrio, distante a unas tres cuadras, acudió al sitio mencionado. Pero apenas apareció fue blanco de un ataque violento. Les arrojaron piedras e inclusive se oyeron detonaciones que serían de armas de fuego.
Los policías, superados en número, retrocedieron y pidieron colaboración de otras unidades. Así evitaron una confrontación de peores consecuencias, según precisaron fuentes de la institución consultadas por diario época.
Replegados en la dependencia policial ocurrió lo insólito. La pandilla, a la cual se sumaron muchos más sujetos (varios de ellos en motocicletas), comenzó a llegar a los alrededores de la comisaría con pretensiones de agresión. Tenían piedras y botellas en las manos. Algunos de los objetos fueron lanzados contra la dependencia.
La situación, a esa altura descontrolada, provocó la llegada de móviles de la Policía de Alto Riesgo, del Grupo de Respuesta Inmediata Motorizado y del Grupo de Intervención Rápida. Hubo corridas, disparos con escopetas de postas de goma y un clima de tensión por más de una hora.
Desde la institución informaron que no hay registro de heridos. Sólo de daños en un patrullero.
“Lamentablemente es bastante común que arrojen piedras a un patrullero cuando acude a verificar algún tipo de incidente, pero lo más grave en este caso es que fueron hasta la comisaría con intención de atacarla”, indicó un integrante de la Fuerza provincial.
El comentario ayer en la populosa barriada indicaba que algunos de los partícipes de los incidentes llegaron de los barrios Quinta Ferré e Itatí y otros de un lugar bastante más alejado como el barrio Colombia Granaderos.
Domingo, 10 de mayo de 2015
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